Accesorios y ropa de seguridad para bricolaje
Actualmente en todas las empresas sean del sector que sean, la seguridad laboral es uno de los aspectos que más se tiene en cuenta, puesto que busca salvaguardar la integridad física de los trabajadores. De hecho, es obligatorio definir un plan de prevención de riesgos laborales que no busca otra cosa que, por un lado minimizar los riesgos, y por otro establecer la forma de actuación en caso de que se produzca un accidente.
En bricolaje, a pesar de no tratarse de una profesión como tal, a menudo se llevan a cabo trabajos que conllevan un cierto riesgo. Sin embargo, la mayoría de los aficionados al bricolaje no tenemos en cuenta usar los equipos de seguridad necesarios en cada caso o, si lo hacemos, lo hacemos de forma parcial.
Pues bien, la razón principal que me ha motivado a redactar y publicar este artículo es tratar de concienciar a los aficionados al bricolaje de la importancia de normalizar y establecer como regla básica el uso de los accesorios y ropa de seguridad.
Sólo de esta forma podremos reducir la posibilidad de sufrir un accidente y, en caso de que ocurriese, minimizar de forma muy importante las consecuencias de éste.
Distintos accesorios y ropa de seguridad para cada tarea
Cuando practicamos bricolaje siempre existe el riesgo de accidentarnos, por mínimo que sea. Por eso, debemos de utilizar un vestuario adecuado.
Equipo básico y polivalente
Sea cual sea el proyecto de bricolaje que vayamos a realizar, al menos, debemos contar con:
- Calzado de seguridad. Aunque hay calzado de seguridad específico para multitud de tareas, también los hay más genéricos. Éstos son los ideales para los aficionados al bricolaje, puesto que tocamos distintas disciplinas y oficios. Yo, personalmente, prefiero las botas bajas puesto que protegen también el tobillo.
- Pantalón de tela resistente pero que, a la vez, permita comodidad en los movimientos. Cuantos más bolsillos tenga, mejor. Seguro que sabes por qué.
- Camiseta ni demasiado holguera ni demasiado estrecha. Se busca libertad de movimientos, pero que no se enganche continuamente con los materiales que estemos manipulando.
No obstante, dependiendo del tipo de trabajo que vayamos a realizar, las consecuencias del riesgo al que estaremos expuestos serán distintas. Me explico con algunos ejemplos:
En trabajos de soldadura
Si vamos a realizar un trabajo de soldadura, corremos riesgo de sufrir daños en la visión y quemaduras en manos y brazos principalmente.
En este caso debemos de utilizar una careta protectora específica para soldadura que nos cubra toda la cara y la parte superior de la cabeza, guantes de serraje largos, y camiseta y pantalón largos y a ser posible ignífugos (son más baratos de lo que podemos creer).
Trabajos en lugares delicados
Si vamos a llevar a cabo un trabajo en algún lugar de mucho tránsito o donde puedan circular vehículos, deberemos de utilizar ropa de alta visibilidad, además de los elementos y accesorios apropiados para la tarea que vayamos a realizar.
Trabajos con partículas en suspensión
Si vamos a pintar con espray en interiores, o a mecanizar madera con herramientas eléctricas (corte, fresado, cepillado, lijado,…), el lugar de trabajo se va a llenar de partículas en suspensión, lo que podría suponer un serio problema para nuestra salud en caso de alargar el tiempo de trabajo.
En estos casos se hace necesario utilizar, además de gafas de protección, una máscara buconasal con filtro de partículas, con la finalidad de proteger las vías respiratorias.
En definitiva, al igual que planificamos nuestros proyectos de bricolaje, también debemos prever a que riesgos estaremos expuestos en cada ocasión y adoptar las medidas necesarias para evitar o minimizar los posibles accidentes. Esto se consigue, además de con mucho sentido común, con los accesorios y ropa de seguridad.
Y piensa siempre que este desembolso no es un gasto, sino una inversión.
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