La eficiencia energética y la estética de un hogar son conceptos compatibles en el modelo urbanístico actual. El autoconsumo en viviendas es un objetivo al que se aferran un número creciente de familias, conscientes de las ventajas de buscar fuentes alternativas de energía. Consolidada esta idea entre los estratos sociales más progresistas, llega el reto de cómo abordar una instalación de estas características teniendo en cuenta el diseño y el componente estético. Sostenible y bonito, dos características que se pueden poner en liza a la hora de integrar los paneles solares en una casa.
Una buena parte de las placas fotovoltaicas instaladas en una vivienda se ubican en el tejado, pues es la posición idónea para optimizar el rendimiento y conseguir el mejor resultado en cuanto a captación de energía y consumo. Pese a que es un espacio que no se aprecia desde algunas perspectivas y que tradicionalmente ha quedado en la última fila de las prioridades armónicas, no deja de ser un punto muy amplio de la vivienda y muchos propietarios se preocupan por su aspecto. Cuando se instalan placas solares, el impacto arquitectónico es mucho mayor, así que se buscan fórmulas para adaptar esta tecnología a las características de la casa.
Las compañías especializadas que instalan placas solares han visto aumentada la demanda de un producto bonito desde el punto de vista estético, y tienen en cuenta este requisito tanto en la forma y en los colores que pudieran ser alterados en este producto, como de la colocación. Todo ello bajo la premisa de conseguir la máxima eficiencia, pues en este reto no se puede olvidar el fin principal de las instalaciones fotovoltaicas, el de obtener la radiación solar y transformarla para crear energía.
Los sistemas de autoconsumo están compuestos por cuatro elementos básicos, que son los paneles solares, la estructura del soporte, el cableado y el inversor. Los colores principales de los paneles son el azul y el negro, dos tonos oscuros, aunque con diferencias evidentes que dan un ligero margen para buscar la opción más adecuada. El soporte admite más variedades, mientras que la posición de los cables o del inversores también se puede tener en cuenta dentro del objetivo estético.
Alquiler
En las fórmulas para adaptar una instalación de placas solares a las necesidades del cliente, también se contempla la financiación. Hay empresas como Otovo que ofrecen la posibilidad de alquilar el sistema de autoconsumo, una posibilidad que supone una notable flexibilidad desde la perspectiva económica. Lejos de realizar una fuerte inversión inicial, el propietario tiene la oportunidad de disfrutar de un servicio de alquiler, comprometiéndose a un pago periódico. La empresa proveedora asume el compromiso de llevar a cabo la instalación y el mantenimiento; mientras que el cliente abona un dinero cada cierto tiempo, de acuerdo con el contrato.
Bajo este acuerdo, el propietario se libera económicamente, ya que no tiene la necesidad de asumir el elevado coste inicial del producto. Mientras tiene contratado el alquiler, puede disfrutar de las ventajas y los beneficios financieros de disponer de una instalación de paneles solares en casa.