Rosco de reyes casero
Como hacer nuestro propio Rosco de Reyes. Estamos ya, prácticamente, en plenas fiestas navideñas y, como es costumbre, el día de Reyes compartimos con la familia y amigos el tradicional roscón de reyes.
Por ello, hoy te traemos un trabajo de “bricolaje de cocina”, ya que queremos mostrarte la forma de hacer tu propio rosco de reyes. Totalmente casero, pero igual de bueno, o incluso mejor que los puedes comprar por ahí.
Con la ventaja añadida de poder hacerlo completamente a tu gusto y al de los tuyos, realizándolo exactamente del tamaño que quieras, con el relleno que quieras, con las sorpresas que los peques de la casa elijan, con la fruta escarchada que más te guste, etc.
Para ello, vamos a contar con la colaboración de nuestra amiga “la reina del fogón”, quien nos enseñará, paso a paso, a hacer un riquísimo Roscón de Reyes.
Anímate!! No es nada complicado. Requiere algo de tiempo, pero merece la pena.
Bueno, vamos a lo que nos interesa.
Video tutorial Roscón de Reyes
Ingredientes necesarios para el rosco de reyes
Las cantidades de ingredientes que indicamos a continuación, son las correspondientes para hacer un roscón de aproximadamente 1 kg de peso.
A fin de tratar de facilitarte las cosas, te voy a indicar los ingredientes organizados por los distintos procesos que deberás realizar.
- Azúcar glas aromatizado:
- 120gr de azúcar.
- 1 limón.
- 1 naranja.
- Masa madre:
- 70gr de leche.
- 10gr de levadura fresca de panadería.
- 1 cucharadita de azúcar.
- 130gr de harina de fuerza.
- Masa:
- 60gr de leche.
- 70gr de mantequilla.
- 2 huevos.
- 20gr de levadura fresca de panadería.
- 30gr de agua de azahar.
- 450gr de harina.
- 1 pellizco de sal.
- Decoración:
- 1 huevo batido.
- Frutas escarchadas.
Bien, una vez tengamos preparados todos estos ingredientes, podemos empezar.
Azúcar glas aromatizado
Comenzaremos preparando el azucar glaseado aromatizado. Para ello, lo primero es preparar la ralladura, con la piel de una naranja y un limón.
En el vaso, echamos 120grs de azúcar, cerramos la tapa y la pulverizamos durante 30 segundos, a velocidad progresiva 5-7-10.
A continuación añadimos las ralladuras de naranja y limón, y programamos otros 15 segundos a la misma velocidad, es decir, velocidad progresiva 5-7-10.
Has visto qué fácil? Ya tenemos preparado el azúcar glas.
Volcamos el contenido del vaso en un recipiente y lo apartamos, de momento, hasta que lo necesitemos dentro de un rato.
Masa madre
Ahora vamos a hacer la masa madre. Por tanto, una vez vaciado el vaso, añadimos 70grs de leche entera, 10grs de levadura, 1 cucharadita de azúcar, 130grs de harina de fuerza, cerramos el vaso con la tapadera y ponemos en la velocidad 4 durante 15 segundos.
Transcurrido este tiempo, sacamos la masa, hacemos una bola, y la introducimos en un bol con agua templada, cubriéndola por completo. Es importante que el agua cubra completamente la bola de masa.
La masa estará lista cuando doble su volumen y flote en el agua, lo que ocurrirá aproximadamente en unos 30 minutos.
Transcurrido este tiempo, la sacamos.
Confección de la masa
Ahora le toca el turno a la masa. Echamos en el vaso los siguientes ingredientes. Importante hacerlo en el orden que indico:
El azúcar glas que habíamos hecho en el primer paso, 60grs de leche, 70 grs de mantequilla a temperatura ambiente, 2 huevos, 20grs de levadura fresca de panadería, 30gr de agua de azahar, harina 450grs, una pizca de sal y, en último lugar, la masa madre.
Cerramos y ponemos a velocidad 6 durante 30 segundos.
A continuación, en la posición de amasado, programamos durante 5 minutos.
Cuando termine, la dejamos reposar dentro del vaso, durante 3 o 4 horas. De esta forma conseguiremos que quede una masa esponjosa.
Transcurrido este tiempo, ayudados de la paleta, bajamos la masa para que quede toda dentro del vaso, lo cerramos, y volvemos a poner en posición de amasado, pero en esta ocasión sólo durante un minuto.
Bien, ya tenemos hecha la masa. La retiramos, poniéndola sobre una superficie enharinada, para que no se pegue, y la amasamos un poco más con las manos.
Depende del tamaño que quieras hacer. Puedes utilizarla toda para un solo rosco o, como en nuestro caso, vamos hacer dos roscones pequeños, por lo que haremos dos bolas.
Ahora podríamos proceder de dos formas distintas.
La primera si continuásemos con la confección de nuestro rosco de reyes, en cuyo caso, continuaríamos con el horneado.
O la segunda opción, que sería guardar la masa hasta el mismo día de Reyes, para comerlo recién hecho.
En este último caso, liaremos la/s bola/s de masa en film de cocina. Es importante, liarla/s bien y sin que se hagan burbujas de aire. Y las dejamos en frío en el frigorífico o, incluso, las podemos congelar.
Bien… ya ha llegado el mágico día de los Reyes Magos. Lo primero es sacar del frigorífico la bola de masa que habíamos hecho, y la dejamos un rato a temperatura ambiente para que se temple. En caso de haberla congelado, la dejamos varias horas a temperatura ambiente para que se descongele de forma natural.
Ahora ya, le quitamos el plástico, amasamos un poco con las manos, le clavamos un dedo en el centro para empezar a darle la forma de rosco, y vamos estirándolo poco a poco.
Vale, una vez le hayamos dado la forma y el tamaño deseado, estará listo para hornearlo.
Horneado del Roscón
Mientras que precalentamos el horno, vamos a dar los últimos retoques previos al horneado.
Lo ponemos sobre la bandeja de horno, e introducimos un molde redondo en el interior de nuestro rosco de reyes, para que en este proceso no desaparezca el agujero.
Trocearemos la fruta escarchada.
Pintaremos el rosco con huevo, ponemos los trozos de fruta, y volvemos a pintar.
Y ahora es el momento de introducirlo en el horno durante 15 a 20 minutos, a 200º.
Los últimos 5 minutos, bajamos la temperatura a 180º para que no se queme. No obstante, si observas que se tuesta demasiado o simplemente te gusta la masa más clarita, le pondremos encima papel de aluminio.
Bueno, una vez transcurrido el tiempo de horneado, ya estará listo.
Ahora lo desmoldamos con cuidado de no dañarlo y, para finalizar, lo abrimos por la mitad y lo rellenamos con lo que queramos. En nuestro caso vamos a rellenar el roscón con nata montada.
Vualá… Ya tenemos nuestro Rosco de Reyes listo para disfrutarlo.