Lavadora ecológica
Lavadora ecológica 100%, que no necesita agua ni productos químicos para cumplir con su función. Únicamente utiliza oxígeno.
No todo son malas noticias. Hoy hemos vuelto a ser capaces de dar otro paso hacia adelante en defensa del planeta.
Hoy, definitivamente es un gran día. Y queremos compartirlo contigo. La noticia nos llega de la mano de El País. Se trata de una lavadora ecológica industrial que no requiere para su funcionamiento ni de agua ni de jabón, sólo oxígeno.
En este artículo te explicamos cómo funciona y cuáles son las ventajas que aporta al medioambiente.
Los pantalones, unos 20, son introducidos en una lavadora ecológica de tamaño industrial y características poco comunes: no necesita agua ni jabón, pero lava los vaqueros el doble de rápido que la tecnología convencional. Según explicó ayer el director de Jeanologia, Enrique Silla, la invención de la compañía valenciana, que está siendo empleada por firmas como Ralph Lauren, Zara y Levi’s para dar a las prendas un acabado vintage, ahorra un 62% de electricidad; un 67% de agua, y un 85% de productos químicos. El ahorro por vaquero sería de 0,38 euros, lo que podría llevar a abaratar el precio que se paga por los vaqueros en la tienda hasta un 5%.
El elemento básico del proceso es el aire. La lavadora ecológica lo transforma en una mezcla de gases que los técnicos de la empresa han bautizado como «plasma» y que se parece (pero no lo es exactamente) al ozono. Los pantalones giran en su interior completamente secos. La máquina se encarga de eliminar las muchas impurezas que deja el proceso de producción y de darle a la prenda el aspecto del «lavado a la piedra».
«La naturaleza necesitaría entre siete y 10 años en realizar un proceso de desgaste así», comenta Roberto Muñoz, responsable del departamento técnico de Jeanologia. La lavadora ecológica, que recuerda a una máquina futurista de los años sesenta, lo hace en 15 minutos. Cuando la abren, al final del proceso, el sótano de la sede de I+D de la empresa, en el Parque Tecnológico de Paterna, se llena de un olor parecido al de una piscina muy clorada. Muñoz afirma que es el mismo olor que queda después de que caiga un rayo. Olor a ozono.
Según la empresa, la lavadora ecológica gigante, llamada G2, toma aire del exterior, lo transforma en «plasma» y, antes de finalizar el lavado, somete el gas a una temperatura de 300 grados que vuelve a convertirlo en oxígeno. Si toda la industria de pantalones y camisetas vintage utilizara la tecnología, afirman, en un año se ahorrarían 4.500 millones de kilovatios/hora; 2,4 millones de toneladas de detergente y 1.200 millones de metros cúbicos de agua. El consumo de agua potable de los valencianos durante seis años, o la electricidad que gasta durante dos años Nepal, un país «pequeño» y «subdesarrollado», tuvo que admitir el director.
Jeanologia ha distribuido una veintena de lavadoras ecológicas en los principales centros de producción, sobre todo en Asia y el norte de África. Vende un promedio de dos al mes, pero el objetivo es llegar a 10 para mediados del año que viene, si la crisis da un respiro. La empresa especializada en tecnología textil tiene un centenar de empleados y facturó 25 millones de euros en 2008, un 15% más que el anterior, explicó ayer Silla.
Origen: El País